15. Gemelas

3.8K 319 101
                                    

Simplemente no me cabe esa idea en la cabeza. Keith y Chloe, es una combinación que me repugna, no creo que Keith me hiciera algo así. Realmente no se si desconfiar, no sé si lo conozco suficiente pero de lo que estoy segura es que deposité toda mi confianza en él, no creo que todas sus palabras bonitas hayan sido una farsa.

Me tomé de los codos y caminé con la cabeza baja por aquellos pasillos. Es inexplicable describir este lugar, por un lado observas a personas jorobadas que te miran con una sonrisa macabra, otros se me acercan susurrándome palabras inentendibles y por ultimo las malditas luces comienzan a fallar.

No es por nada pero no soy amante de la oscuridad, me asusta un poco en cierta parte. Creo que nunca superaré este miedo y todo es debido a la mala broma que me hizo Violetta. Recuerdo que siempre corría a mi cama lo más rápido que podía cuando apagaba las luces, pero un día simplemente no llegué a la cama por que Violetta se me cruzó en el camino haciendo que me desmayara del susto.

—¡Vas a morir si continuas aquí!— una niña con la contextura rara de su cuerpo me hizo sobresaltar, solté un grito agudo haciendo que me coloque la mano en el pecho, luego ella comenzó a reírse y salió corriendo por aquel pasillo un poco tenebroso por las luces en mal estado. El foco que iluminaba la parte en donde estaba se apagó echando chispa, miré al fondo y desde ese momento sabía que tenía que correr si no quería que me atrape en esta oscuridad.

Mientras más corría las luces que me iluminaban se apagaban, la situación se tornó como en las películas, si no corría lo más rápido quedaré atrapada ante mi mayor miedo. Era imposible llegar al fondo del pasillo, los focos se apagaban más rápido, esta vez, había un foco apagado que tenía la delantera. Eleve mis manos para correr con más impulso, cuando estaba a punto de llegar siento que me arrastran a una habitación, intente patalear y gritar pero aquella persona tenía mucha fuerza, incluso me había tapado la boca con sus manos.

—¡Lydia, Lydia!— seguí pataleando para que me soltarán ¡Soy yo! ¡Sh! ¡Sh!— me calme un poco, pero aún seguía forcejeando— ¡Soy Keith!

Mire de reojo a Keith, quien aún me tenía entre sus brazos fuertemente para no escapar. Su mirada era compresiva, aquellos ojos marrones estaban oscuros casi ni se podía distinguir entre la pupila y el iris.

— ¡Maldición Keith! No hagas eso, casi me da un infarto— apoye la cabeza en la suya, en ese momento recordé lo de que dijo Chloe y no sabía si preguntarle o simplemente quedarme callada y esperar.

— ¿Ocurre algo?— tomó mi rostro entre sus manos, aunque este oscuro puedo ver como sus ojos marrones brillan.

— No, ¿Por qué?— me solté de sus brazos alejándome un poco de su cercanía. — ¿Qué fue eso de las luces?

— Las bromas estúpidas de las hermanas Harmont.— Sacó la cabeza de su escondite— Son gemelas, hay que tener cuidado porque cuando están en la oscuridad pueden hacerte daño, pero cuando están en la luz se esconden.

— Ah, pues ya me voy— trate de salir pero un brazo se interpuso impidiéndome el paso.

— Estas rara— susurró— Sé que ocurre algo, tal vez no pueda saberlo ya que tu mente se ha hecho más fuerte después de lo que ocurrió con Ashley, pero sé tiene que ver conmigo.

— ¿Por qué estabas despierto aquella noche cuando me encontré con Chloe en el baño?

— Con que es eso— se tomó la barbilla.

— ¿Por qué Mike fue a verme primero y cuando regresamos tú estabas ahí?

— Es estúpida Chloe si piensa que con sus mentirillas va a conseguir algo— Keith estaba furioso, en la oscuridad ya no se podía ver el marrón de sus ojos, estaban negros y oscuros— Creo que te ha dicho que estuve con ella aquella noche, ¿No es así?

— Si— agache mi mirada, me sorprendí al ver que no estaba enojado conmigo por haber dudado de él. 

— ¿Creíste en eso?

— No, me convencí a mí misma que confiaba en ti y no me harías eso pero quería preguntártelo porque realmente estaba insegura, tengo miedo de que te vayas y te aburras

— Lydia, no te haría algo así. No soy como esos imbéciles arrogantes que se tiran a cualquiera, lo único que necesito en mi vida eres tú, siento que puedo aguantar en este lugar contigo— me tomo de las manos— Además detesto a Chloe, está loca y si me viste hablando con ella es porque quería hacerte algo solo para llamar la atención.

— Lo sé.— me había quedado sin palabras.

— Todos conocen la faceta oscura mía y me juzgan, pero tú conoces a mis demonios y lo que la gente no sabe es que tengo ciertos ángeles escondidos que solo tú te mereces conocerlos.

¿Dónde está el Keith frío y amargado? ¿Dónde está el Keith que me trataba mal y me ignoraba? Con lo que acaba de decir me hizo poner en razón, entendí el cambio de Keith, entendí por qué ya no era el mismo chico frío y cortante de aquel autobús que me decía que no lo mirara. Esa era su faceta, todos solo veían aquella parte de él, pero ahora que lo conocí, sé mucho más de él. El Keith de ahora es el verdadero, conozco al pequeño niño el cual su hermana conocía, él no es malo solo tiene miedo. Muchas personas han llegado a su vida y se han ido, ya sea con miedo u odio hacia Keith, o muertos.

— Te quiero, Keith.— abracé a Keith lo más fuerte que pude, simplemente estaba segura de él y nada me haría cambiar de opinión. Tal vez esté encerrada en este lugar pero me di cuenta que aún he resistido por él y sé que de igual manera Keith por mí.

— Yo también te quiero, mi pequeña destrucción.- tomo mi rostro entre sus manos y me dio un corto beso.

— Ustedes dos...  — una chica morena hizo que nos separemos— No se por qué les hablo, pero ella me dice que tengo que hacerlo.— Era bonita en cierta forma, sus cabellos eran ondulados y abultados con los ojos color café oscuros.

— ¿Que te dice?— pregunté. La chica morena apretó sus puños con miedo, desde el fondo de la oscuridad salió otra chica igual a la que está frente a nosotros, eran gemelas.

— Vamos díselo— dijo tocándole el hombro.

— Van a morir si no salen de este lugar, morirá la chica de cabellos rojizos de la peor forma.— Aquella chica no nos miraba a los ojos, era como si tratara de esconderse de alguien.

Hubo un silencio, es como si tratara de analizar lo que su subconsciente le dijera.

— Contextura pálida, el color de los cabellos rojos se esparcirá por todo su cuerpo, garganta, corte, rubio, hombre y mujer, el chico castaño llora pero llora porque fue el causante.

Me quede paralizada, si es solo una niña trastornada y yo me estaba haciendo alucinaciones. Aquella pequeña solo miraba a los lados como si temiera que "aquella voz" le hiciera daño. No sé realmente si me está mintiendo, pero lo dice con tanta seguridad.

— Váyanse— espeto Keith molesto— Ahora, váyanse no es gracioso lo que hacen, siempre tienen que asustar a los demás.- las gemelas salieron corriendo en la oscuridad dejándonos a Keith y a mi solos.

— Quiero irme.— susurre abrazándome a mí misma.

— Vamos— abrió sus brazos— No hagas caso, ellas siempre dicen eso.

— ¿Y si es cierto?

— Lo afrontaremos. 

***

¡Hola! Lo siento por haber estado inactivas estos días, me han surgido unos problemas que me tienen mal hasta ahora, en realidad aún tengo miedo pero espero que todo mejore, pero bueno, no se realmente si los siguientes días podré subir, por ahora estos problemas han hecho que mi inspiración se esfume y no tengo tiempo de pensar en nada. No piensen que los abandonaré, tengo las ideas de la novela, sé que ocurrirá después pero no tengo la imaginación para hacer de esas ideas un capítulo, tal vez el jueves suba capitulo, créanme que haré lo posible para poder subir capítulos entiéndanme si? Es horrible pensar en una novela cuando tu papá está en un hospital.

Por ahora no hay preguntas,espero les guste, los ama con el corazón Kind♥

De verdad, lo siento.


Lydia® [LIBRO 1-2] BORRADORWhere stories live. Discover now