Un Amor Para Recordar

capítulo 15

Jennifer

-Nos vemos más tarde, hija-dijo mi mamá- vendré a hablar con el profesor.

-De acuerdo- besé su mejilla y bajé del auto- te quiero.

-Yo más mi niña- me sonrió y yo entré al instituto.

Caminé hasta llegar a mi casillero y dejé mis libros.

-¡Hola, Jenni!- Gabi me abrazó por la espalda.

-Hola, Gabi- sonreí- ¿por qué estás tan feliz?, ¿algo pasó en la cita con Zed?- la miré con una sonrisa

-¡Somos novios!- dijo emocionada y todos los del pasillo la miraron raro.

-¡Felicidades!- dije y la abracé.

-Gracias- dijo y se separó- ¿hoy si irás a educación física?- me miró y yo hice una mueca- Jennifer, hace como tres clases que vas faltando.

No podía seguir ocultándolo. Tenía que decírselo.

-Gabi, tengo que contarte algo muy serio- dije y lágrimas amenazaban con salir.

-Jenni, que pasa. Me estás asustando.- Me miró preocupada y la campana sonó.

-Te lo diré en el receso- dije y me fui sin que ella respondiera.

Fui al salón de biología y me senté en mi lugar de siempre. El salón poco a poco comenzó a llenarse hasta que la profesora entró.
La profesora comenzó a dar la clase y yo sólo pensaba en cómo decirle a Gabi que tenía cáncer.
En eso la puerta se abre de golpe y un Aiden agitado entra.

-Señor Harrison, llega tarde- le dice la profesora con los brazos cruzados.

-Lo siento profesora yo...

-Vaya a sentarse.

Él hizo lo que la profesora dijo y se sentó a mi lado.

-Hola, enana- dijo en un susurro para que la profesora no lo escuchara.

-Hola, jirafa- sonreí- ¿por qué llegaste tarde?- lo miré y el tragó saliva.

-Me dormí- dijo rápido.

Sólo asentí y en toda la clase no hablamos.
La campana sonó y eso significaba que era el receso y tendría que decirle a Gabi lo que me pasaba.
Tomé mis cosas y estaba por salir cuando Aiden me habló.

-¿Almorzamos juntos?- preguntó rascándose la nuca.

-Claro- sonreí- nos vemos luego.

Dije y salí del salón. Iba caminando cuando alguien me toma del brazo y me arrastra al baño de mujeres. Era Gabi .Cerró la puerta con traba y me miró con los brazos cruzados esperando una respuesta.

-Yo...

-Dilo- dijo y yo di un pequeño salto- ¿no te agrada el profe y por eso no vas?, a nadie le agrada ese viejo pero...- la interrumpí.

-Tengo cáncer- dije con los ojos cerrados y cuando los abrí miles de lagrimas comenzaron a salir. Ella abrió sus ojos a más no poder y negó con la cabeza.

-¿Qué dices?- sus ojos se comenzaron a cristalizar- no puede ser verdad- tomó su cabeza con ambas manos.

-Estoy muriendo, Gabi- dije Y dejé caer mis brazos a los lados- voy a morir.

Cerré mis ojos y me dejé caer en el piso. Gabi hizo lo mismo y me abrazó.

-No vas a morir Jenni, esas cosas se curan.

-No hay nada que hacer- dije abrazanda más fuerte-n o se puede hacer nada.

Ella no dijo nada y sólo me abrazó. Estuvimos un tiempo así hasta que comenzaron a tocar la puerta.
Me paré y me eché agua en la cara.

-Gabi, tienes que prometerme que no le diras a nadie- dije y me coloqué un poco de maquillaje para que no se notara que estaba llorando.

-¿Aiden no lo sabe?- ella hizo lo mismo. Negué con la cabeza- le harás más daño si no le dices.

-Es mejor así- dije en un susurró.

Abrimos la puerta y muchas chicas nos miraron furiosas y entraron.
Gabi me miraba con lastima y eso me molestó un poco.

-Oor favor, tratame como si no estuviera muriendo- le pedí.

Ella me dio una sonrisa triste y me abrazó.

Aiden

Luego de que Camila se fue, llevé a Lukey a pasear.
Lo llevé a un parque que estaba cerca de casa. Ahí había varias personas; niños jugando con sus padres, parejas y más.
Pero una pareja llamó mi atención. Era una pareja de ancianos, estaban discutiendo y el señor le dio un beso. Ella sonrió y lo besó y se abrazaron.
Esa imagen me resultó algo tierna.
Pero me puso en duda.
¿Era Camila la indicada?.
Al principio pensé que sí, pero vienen estos sentimientos tan raros por Jennifer, y me ponen en duda.

En toda la noche no pude dormir pensando en eso. Camila era hermosa... Pero Jennifer tiene algo... que no sé como describirlo. Pero es una sensación que no siento por ninguna otra chica.

(...)

Llegué tarde al maldito instituto, y me senté al lado de Jennifer.

-Hola, enana- dije bajo para que la profesora no me escuchara.

-Hola, jirafa- me dijo y sonrió, esa sonrisa tan dulce que tiene- ¿por qué llegaste tarde?- Tragué saliva. No iba a decirle que estaba dudando de mi relación con Camila.

-Me dormí- dije rápido. Ella asintió y en toda la clase no hablamos.

Luego de preguntarle si almorzaria conmigo, me fui del salón y encontré a Camila hablando con Michael... O más bien discutiendo.

-¿Qué pasa aquí? -pregunté mirando serio a Michael.

-Nada amor... Es que Michael cree que yo tengo su cuaderno de matemáticas- dijo nerviosa Camila.

-Sí, lo siento Camila. Nos vemos, Aiden- dijo y se fue serio.

-¿Irás a verme en las prácticas de la obra?- preguntó jugando con el cuello de mi camiseta.

-Sí, amor- tomé su mano y ella con su otra mano libre tomó mi rostro y me besó apasionadamente.